Según esta regla, debemos tratar de corresponder a lo que la otra persona nos proporcione. Si un amigo nos envía un regalo de cumpleaños, deberíamos recordar su fecha de cumpleaños con un regaño de nuestra parte a cambio; si una pareja nos invita a una fiesta de sus amigos, deberíamos asegurarnos de invitarle a una nuestra. Actuar con reciprocidad con regalos de cumpleaños o con unas invitaciones a una fiesta pueden parecer una prueba débil de la potencia de esta regla, pero pueden provocar un cambio considerable en el comportamiento. Dato curioso : en virtud de la regla de la reciprocidad, estamos “obligados”, por tanto, a devolver en el futuro favores, regalos, invitaciones, muestras amistosas y demás. Así, como muestra de la deuda que acompaña el recibo de dichos favores, expresiones como “estoy en deuda” se han convertido en sinónimo de gracias (como por ejemplo, la palabra “ obrigado ” en portugués; o de la palabra “ sumimasen ” que significa gracias y que literalmente se traduce
La atención es un mecanismo evolutivo que regula y distribuye nuestros escasos recursos cognitivos. Esta capacidad se encarga de mantener un nivel de activación adecuado para procesar toda aquella información que nos es relevante. Este proceso es clave para el funcionamiento óptimo de las personas y es muy difícil de conseguir, ya que la capacidad de atención de las personas es bastante limitada. Pueden cambiar muchas cosas en nuestro entorno sin darnos cuenta. No lo notamos porque nuestra atención no lo nota. Este fenómeno se denomina ceguera por desatención: hay cosas que cambian, pero no nos damos cuenta porque no estamos prestando atención. Asimismo, está la ilusión de atención, que se produce cuando perdemos un momento de cambio a nuestro alrededor pero en ningún momento lo sospechamos ni nos damos cuenta. Todo esto se debe a que tendemos a pensar que tenemos la ilusión de que nuestra atención es mucho más eficaz. El criterio que usamos para captar nuestra atención es la vigilanci